Una perdida interesante…
Ha perdido algo? Como se ha sentido al perderlo, imagino ha dejado todo en el momento para buscarlo, se ha preocupado su corazón y es posible que se haya inquietado en la forma de ser mas eficiente en su búsqueda.
Le quiero contar acerca de una perdida interesante en la Biblia, Jesús relata la historia de tres parábolas para describirla, “ La oveja perdida”, “El dracma perdido” y por ultimo “ El hijo prodigo”; las tres se asemejan mucho puesto que en las tres alguien pierde algo, recuerda la historia de la oveja perdida ( Lucas 15:1-7), el pastor dejando a las 99 sale en búsqueda de una extraviada y aventurera ovejita , que al momento de encontrarla cura sus heridas y tomándola en sus brazos la regresa al redil, que historia mas tierna no le parece? Se ha sentido alguna vez así, como una ovejita perdida y lastimada, que hermoso es cuando nos sentimos en los brazos del pastor que amorosamente nos consuela, cura nuestras heridas y nos invita a continuar en el redil, la familia de Dios, ahora bien recuerda aquella mujer que perdió el dracma “moneda” (Lucas 15:8-10) el valor que tenia era tan importante, que imperativamente enciende su lámpara, barre toda la casa y buscando con diligencia no descansa hasta encontrarla…
En las dos historias estos personajes se alegran al encontrar lo perdido, celebrando junto a sus amigos. Que alegría! , la preocupación y aflicción hacen su franca retirada puesto que lo perdido es encontrado…
Más quiero que hoy reflexionemos sobre la tercera historia, esa la del hijo prodigo, ( Lucas 15:11-32) debemos recordar que en esta parábola existen tres personajes en escena ; Un hombre tenia dos hijos , el menor de ellos decide tomar lo que le corresponde e irse de aventuras por el mundo, dejando las comodidades y el calor de hogar, mas con el tiempo se da cuenta que la decisión no fue tan buena como pensó y que en su inexperiencia y mala administración lo ha perdido todo, su única esperanza es volver al hogar, arrepentido en su corazón solo aspira a ser considerado un jornalero pues sabe que se equivoco, cometió un error mas vuelve al hogar con un corazón humillado.
Esto me hace pensar en lo que dice Salmos 51:17 “Al corazón contrito y humillado no despreciara tú, oh Dios”.
Bueno quiero que reflexiones en el hecho de que aquí se relata una perdida bien interesante, pues el padre sale a recibir al hijo que regresaba y con regocijo en su corazón sale a su encuentro, celebra junto a sus siervos matando el becerro mas gordo, colocando anillo en su dedo, colocando nuevos vestidos y calzados en sus pies.
Así como aquella ovejita perdida el hijo es tomado en los brazos del padre acariciado y restaurado al redil…
Pero nos estamos olvidando de la perdida más importante de esta historia , observe la escena fuera de casa, mas allá de la fiesta hay un hermano molesto, enojado ante tal celebración no queriendo participar de ella . Allí es donde el padre sale en búsqueda de lo perdido, “Le rogaba que entrase” Vs. 28b…
Jesús relata estas historias ante un comentario de los fariseos vs.1y 2 , aquellos que se jactaban de permanecer fieles a la ley de Dios.
Me alegraría que UD y yo reflexionemos en las muchas veces que hemos hecho lo mismo, en zapatos de fariseos o como aquel hno mayor hemos reclamado e injustificado la gran misericordia de Dios, en recibir y restaurar al pecador, no juzgándole por sus errores o malas decisiones sino mas bien demostrándole su inmenso amor y bondad celebrando su regreso.
Recuerde que el padre siempre estará con sus brazos extendidos esperando que vuelva, no importa las veces que se haya equivocado, las muchos errores que haya cometido o las malas decisiones que haya tomado, Ud. sigue siendo parte de su familia y hoy es tiempo de regresar al hogar, la fiesta lo espera, la celebración esta por comenzar, no tarde su regreso ya que el padre con amor lo recibirá…
Más era necesario hacer fiesta y regocijarnos,
Por que este tu hermano era muerto,
Y ha revivido; se había perdido y es hallado.
Lucas 15:32
Por: Elvira Maldonado I.
CHILE